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¡Que no te de pena y entérate!  Aquí, todo lo que siempre has querido preguntar sobre la vagina

Estamos de acuerdo amigas, que una parte de nuestro cuerpo que nos causa muchas inquietudes es nuestra zona íntima. Y para despejar nuestras dudas, casi siempre le preguntamos a una amiga, a la familia o al médico, sin embargo, hay ciertas preguntas que muchas tenemos y que a veces nos da pena o se nos dificulta hacer.

Por eso hoy presentamos cinco preguntas más frecuentes sobre la zona íntima femenina y las respondemos de una vez por todas aquí.

1. ¿Por qué mi zona íntima no se ve como en las películas?

La publicidad, las películas y las revistas se han esforzado en hacernos creer que todas las vulvas, labios vaginales y pubis lucen exactamente igual, por ejemplo: de tamaño pequeño, labios delgados, cerrados y sin vello, lo cual es completamente falso. La apariencia de la zona íntima es diferente de persona a persona, por lo que nos podemos encontrar con todo tipo tamaños, colores, así que basta de inseguridad y siéntete orgullosa de cómo eres.

2. ¿Sentir dolor en las relaciones sexuales es normal?

Si el dolor ocurre durante la penetración es posible que se deba a espasmos musculares involuntarios y tensión en el piso pélvico. Otra razón común es la resequedad vaginal, que puede resolverse con el uso de un lubricante o de un humectante vaginal.

En caso de que el dolor durante el sexo persista o se presente junto con ardor al orinar, comezón vaginal, flujo blanco, espeso, pero sin olor podría deberse a una infección por candidiasis, una de las infecciones vaginales más comunes causada por hongos en la vagina, que sin embargo, no suele ser grave y cuyo tratamiento a base de antimicóticos, se encuentra al alcance de todas. Para consultar más información sobre cómo tratar la candidiasis vaginal, solo haz clic aquí.

3. ¿Puedo tener una infección vaginal si soy virgen?

Aunque la actividad sexual frecuente y sin protección es un factor de riesgo para desarrollar infecciones vaginales eso no las determina. A decir verdad, es muy probable que todas las mujeres en el mundo presenten algún tipo de infección vaginal al menos una vez en la vida sin importar si han tenido o no relaciones sexuales.

Otros factores de riesgo para sufrir de infecciones vaginales como la vaginosis bacteriana o la candidiasis, incluyen tener una mala higiene, usar ropa interior ajustada o de tela sintética, estar embarazada, tener una diabetes mal controlada e incluso el uso de algunos medicamentos como los antibióticos o corticoesteroides. Por lo que no necesariamente se producen por contacto sexual y una mujer virgen puede sufrirlas.

4. ¿Con el tiempo la vagina ya no aprieta?

Debido a los cambios hormonales que puede presentar la mujer a lo largo de su vida, tanto la forma, tamaño y apariencia de la vulva y vagina pueden sufrir diferentes cambios. Y es, por ejemplo, en la menopausia, o sea, durante el cese de la menstruación que la producción de estrógenos (hormonas femeninas) disminuye, por lo que la zona íntima femenina puede mostrar cambios notorios.

Dentro de tales cambios tenemos, por ejemplo, los labios mayores y menores se vuelven más delgados debido a una disminución o pérdida de grasa subcutánea, así como también se presenta cierta atrofia de la mucosa vaginal, que hace que se vuelva fina y seca, debido a que la lubricación se reduce, lo que puede provocar dolor o incomodidad durante las relaciones sexuales.

Asimismo, el pH vaginal incrementa y con ello un mayor riesgo de sufrir infecciones urinarias. Ante todos estos cambios, existe la creencia de que con la edad la vagina ya no puede disfrutar y complacer en las relaciones sexuales, sin embargo, es un mito, pues con los cuidados adecuados, se puede mantener saludable esa parte de nuestro cuerpo y disfrutar sin mayores complicaciones.

Además, los ejercicios de Kegel, que consisten en la contracción voluntaria de los músculos pélvicos pueden ayudar a fortalecer sus paredes y también contribuyen a prevenir problemas de incontinencia que suelen acompañar a la atrofia vaginal, así como el uso de lubricante facilita las relaciones sexuales; también se pueden aplicar cremas vaginales a base de hormonas para restaurar el tejido vaginal, pero siempre bajo la supervisión del médico y de acuerdo al caso de cada paciente.

5. ¿Si no tengo relaciones sexuales por mucho tiempo vuelvo a ser virgen?

Existe el rumor sobre que si llevas mucho tiempo sin tener sexo, tu vagina se va a cerrar y cuando tengas nuevamente relaciones sexuales, te dolerá como si fuera tu primera vez. Pero tal cosa, es totalmente falsa.

Puede ser, que los músculos de tu vagina puedan estar tensos al principio, pero al momento de la penetración no te debe doler. Recuerda, que es más probable que presentes dolor durante el sexo, debido a una infección vaginal, que por dejar de tener contacto sexual.

Asimismo, si llegaras a presentar dolor recurrente en las relaciones sexuales y empeora, lo más recomendable es que consultes al médico, pues hay muchas razones por las que te puede estar pasando y no precisamente por no tener sexo durante algún tempo.

Amigas, a cuidarse mucho y no olviden consultar a su médico.